Hay momentos en los que te das cuenta de que no quieres volver. No quieres irte de un lugar donde has sido feliz. Y, a veces, tampoco quieres volver a un sitio donde ya lo fuiste.

¿Qué quieres decir con todo esto?

Digo, simple y llanamente, que no quiero irme. Quiero quedarme contigo.

Pues quédate.

Ojalá fuera tan fácil. Pero no lo es. Y lo sabes.

Haremos que lo sea. Solo hay que intentarlo.

Pero es que estoy harto de intentar, intentar y no conseguir nada. Me siento débil. Me siento solo.

Me tienes a mí.

Solo por tiempo limitado. Eres como las ediciones especiales. Solo puedo tenerte un tiempo. Si no te compro en el momento del lanzamiento, te pierdo hasta encontrarte de segunda mano.